«Aquel que quiera edificar torres altas, deberá construir sólidos fundamentos«
Celebramos los éxitos en la vida escolar y laboral de nuestros niños, porque también nosotros nos sentimos, en parte, responsables de ellos. Contibuímos a sembrar la zapata y a despertar las capacidades con las que logran esos éxitos. Ellos llevan en la frente la huella de los que de una u otra forma gozamos del privilegio de ayudarlos a crecer y a ser quienes son hoy. Felicidades y ¡¡¡que siga la cosecha!!!

































